DV Capitulo 2 -3

Capitulo 2
La noche habia llegado y ella se encontraba detrás de una cortina donde solo su padre lograba ver su cuerpo con una polera de tiras y no deseaba que kurapika viera las marchas en su piel que ella misma aborrece e intenta ocultar.
-el color se pierde- estiraba su mano y su padre continuaba anotando al igual que el rubio.
-es todo por hoy, siento haber tomado tu tiempo, señor murian me marcho tengo un trabajo que hacer- salía apresurado y ambos se quedan mirando.
-papa- llamo al mayor y este retiraba la cortina- no confió en el...-confeso.
-es un buen chico... no te preocupes- termino de decir ya en el pasillo de la casa.
"creo... que miente..." pensó ante de cerrar los ojos y recordar su vida hasta ahora.
...
-otra vez, esto o funciona!- exigía la mujer de cabello naranjo a sus empleados que con tinta en mano continuaban perforando la piel de la niña de tan solo 4 años que lloraba del terror y dolor de estar atada a una mesa.
-ahh!-gritaba ____ sin saber porque le hacían tal daño una y otra vez cada vez que no lograba emitir la habilidad que su madre insistía que habia heredado.
Con su voz a punto de estropearse ella dejo de quejarse por el dolor de los entrenamientos junto a su familia que solo la veían como un futuro potencial al ser exactamente igual a la líder del grupo de la mejor academia de combate según registrada, pero de lo que se dio cuenta años mas tarde es que ella heredo su apariencia total ya que su ex esposo tampoco tenia tales habilidades y solo es la copia de su padre ya que en si, su generación no tenían genes propios y copiaban exactamente igual a excepción que lograban retener el aura de otros y que era una enfermedad según los ancestros, pero que solo hace una generación sirvió para ganar una de las mayores guerras registradas según los cazadores.
-el día en que te suicides estaré libre de haber traído a alguien tan inútil a este mundo – recordaba kiiro una y otra la voz que se asemeja mucho a la suya y recordada sus manos sangrar con su cuerpo tan débil que no lograba sostenerse de pie.
"basta" le suplicaba a sus pasamientos una vez que abrió los ojos y noto que ya era hora de levantarse para ir al colegio.
-respira... respira...- se dijo a si misma al sentir su cuerpo temblar, sus manos sudar juntos con su corazón que le hacia sentir la inmensa soledad al ser abandonada.
-ya me voy...- dijo sin ánimos al salir de la casa y caminar con lentitud por la vereda sin mirar a su alrededor y esquivar a las personas por le color que emanaban y de alguna manera lograba notar sin mirar a la persona, es asi como en momentos de tristeza su percepción cambia al igual que su débil corazón.
Pasando los días y llegaba el fin de semana que traía consigo las burlas del colegio, el nerviosismo cada vez que se desorientaba al no poder evitar se empujada y todo los malos momentos de tenia en su pasado le atormentaban de vez en cuando, sin que se diera cuanta y sin saber como afrontarlo, es por eso que su familia se motivaba a que lograda tener otra visión de la vida y una oportunidad nueva a su futuro.
-kiiro!- escucho la voz de su prima que se despedía al ya terminar con su trabajo que realizaba en las cercanías, abrazándose con cariño ante la estación de buses en la cual estaban.
-adiós- se despidió con alegría, sabiendo que se volverían a ver muy pronto con los panoramas que habían propuesto.
-recuerda que eres fuerte- le animo al sentir su tristeza cotidiana.
"gracias" pensó y camino junto a su padre y kurapika que sin saber el porque estaba le miraba de reojo de vez en cuando sin saber el motivo de su curiosidad.
-quieres ir a comer algo?- le proponía su padre y ella que estaba algo distraída se demoro unos segundos pasa asistir y sonreír levemente ante los dos adultos que le acompañaban.
"sostiene bien lo cubiertos" analizo la peli naranja y sonrió para si misma sin saber que su padre le preguntaba algo pero debido a que se distraía con facilidad le era complicado enfocarse en un solo tema.
-buenos días- interrumpió un hombre de la nada y les preguntaba su conocían a un hombre que supuestamente esta rondando el lugar y ella con temor no miro y solo escucho a su padre y al rubio negar rotundamente el reconocerlo.
-mientes...- susurro una vez que los hombres de fueron y kurapika le miro con seriedad ante el descubrimiento y ella sintió pánico al reconocer su instinto asesino.
"no quiero estar cerca de el" pensó al terminar de comer y evitar mirarlo.
Negándose a compartir tiempo con el rubio, salía de casa sin rumbo alguno para poder estar sola, pero de alguna manera siempre se topaba ante la búsqueda de aquel color que emitía cierto individuo y terminaba siendo aquel escarlata.
"esta cerca..." pensó y salió corriendo luego de salir de clases y al mirar se dio cuenta que era un color distinto y al sentir un empujón vio que un color a la oscuridad misma aparecía y la segaba por completo, cayendo a la inconciencia de inmediato al no poder soportar el nen de un individuo cerca de ella.
Aterrada y sin saber que sucedía despertó en una habitación totalmente desorientada y no lograba ver nada debido a que sus lentes ya no estaban y solo distinguía unos colores que se aproximaban y otra vez la oscuridad misma aprecia.
"una mujer" pensó entre todo el caos que ella misma estaba consiente.
Asi que aferrándose a aquella persona de cálido color y que por lo poco que escuchaba era un doctor se aferro a el hasta que el color escarlata apareció y ella salió del lugar a toda prisa.
-tengo miedo-se aferro a su cuello con lo poco que lograba sentir ante el pánico.
-ella es una amiga- le explicaba el rubio y ella de a poco de tranquilizaba.
-que me paso- continuaba ella entre el llanto.
-te desmayaste y ella te llevo a un lugar seguro, no le temas-insistía pero ella continuaba sabiendo que ella era la sensación de la muerte y por alguna razón el ya no era de temer.
-no me dejes-añadía mas calmada y se volvió a aferrar a el hasta que llego a su casa y su padre algo inquieto y aliviado le entrego sus lentes y logro notar que todos están a su lado con preocupación en sus rostros.
Aun asustada por lo anterior, le explicaron que debido a su habilidad para ver los auras de los demás lograba notar el poder y la fuerza de las personas.
-entonces es una habilidad?- le preguntaba a kurapika otra vez que se lo volvía a encontrar en los alrededores de donde vivía.
-claro que si...-le respondía con amabilidad y ella le sobrio con felicidad, sintiendo como la mano del mayor le acomodaba el cabello detrás de su oreja con bastante cuidado.
-gracias-susurro y abrazo por la cintura al rubio que se quedo estático por aquel gesto.
Legando a casa, le explicaron la situación a su padre que estaba preocupado e interrogo a su hija luego de estar solo los dos, pero ella oculto lo que habia visto ya que sabia que aquella joven era peligrosa.
"nunca habia visto tanta oscuridad" miraba el techo de su habitación ya en la noche y se sorprendía que aquel aura fuera tan oscuro que no lograba olvidar aun.
-ahhh- grito al despertar y callo de la cama exaltada al sentir que su gata saltaba en su abdomen y la despertaba de golpe -hana!- reclamo al ver que el animal estaba caminando a la puerta luego de saltar de su closet.
-ya despertaste- le hablo su madrastra que comenzaba a preparar el desayuno y vio como la peli anaranjada iba al baño aun adormilada.
Caminando al colegio sin ánimos alguno, se acomodo los lentes y miro el color de la presencia de sus compañeros que no tenia ganas de interactuar y suspiro mirando al suelo sintiendo los empujones y palabras de insultos de cada mañana.
"nada a cambiado" volvía a elevar la mirada y caminar por el pasillo del colegio y sentir que le lanzaban agua con un balde.
-límpiate estúpida- la empujaban el grupo de compañeros que siempre estaban al tanto de tener una oportunidad para humillarla.
"esto no es nada" miro fijamente su silueta al espejo del baño tras escapar de las burlas.
-esto no es nada- repetía esta vez en voz baja y recordaba su sangre caer de sus extremidades, y la mirada de ambición de su madre.
"debo llamar a mi padre" pensó al mirar al suelo y notar que el piso estaba mojado por el agua que escurría de su uniforme escolar.
Llegando a casa mas temprano de lo inusual, no emitió palabras para explicar su condición y simplemente se fue a duchar y cambiar de ropa.
-estaré en mi computadora- aviso luego de comer junto a sus padres y camino a su habitación para encerrarse y ver las series que tanto le gustan por distraerle de la realidad.
"si tan solo fuera fuerte" anhelo al sentir el golpe de una de sus compañeras al otro día en que todos miraban la escena y se entretenían de verla en el sucio piso del pasillo.
Sosteniendo sus lentes para que no se le cayeran, miro a su alrededor para notar que aun era mediodía y que las nubes por la ventana mostraban que llorera.
-débil- repetían otras ya que en cuanto quiso defenderse no logro ocultarse del golpe y callo otra vez el suelo para sentir que sus dientes se golearon contra sus labios.
"estoy sangrando" pensó nerviosa y los demás huyeron al saber que esta vez se habían pasado de la raya con sus supuestas bromas.
-me caí... - le explico al profesor que la encontró y dejaron que volviera a casa sin problema alguno.
Suspirando algo agotada de caminar, se detuvo al notar que sus ojos lograban ver varios colores que inundaban su visión, siendo inevitable no ver o seguirle con la mirada.
-kurapika- susurro y desde la otra calle estaba el rubio con otros chicos.
-kiiro-le llamo el rubio que avanzaba junto a los demás y noto el aura violeta y otra verde oscura.
-hola-elevo la mano en general y evito la mirada de todos para mirar al suelo.
-que te sucedió?- se asombro kurapika al tocarle el rostro y elevarlo para mirar como tenia una herida en la boca que aun emanaba sangre.
-me caí- respondió mirando a los dos chicos que conversaban y de pronto noto como un aura oscuro estaba cerca-tengo miedo-expreso tomándole del brazo y ocultarse de la oscuridad que le hacia querer huir.
-no pasa nada, ella no te hará nada- la atrajo a su cuerpo y abrazarla.
"no abras los ojos no los abras" sostenía con toda su fuerza al rubio que espero a que su amiga de cabello celeste se fuera
-vamos- le sacudió a los minutos y allá abrió los ojos para notar que solo estaba en plena vereda y que el cielo estaba oscuro por la lluvia que se aproximaría.
-si- le sostuvo la mano por instinto y lo sigue hasta que este se detuvo mirándola fijamente.
-eleva tu rostro- la mostraba su mano y sacaba una cadena con su habilidad y aura que cambiaban de color.
"miedo" reconoció la sensación y se contuvo de no temblar, pero sintió una agradable sensación en sus labios, que al abrir los ojos noto que este tenia su mano y sus labios habían sanados.
-ya no duele- finalizo con una sonrisa y ella aun perpleja le mira fijamente.
-Gracias- sonrió y se sonrojo al pensar que podría haber sido sus labios.
"no pienses en eso" negaba con la cabeza al caminar a su lado y llegar a su casa.
-señor, le queria proponer el plan b-hablo el rubio en cuanto llegaron y fueron recibidos por el dueño de casa y la mas baja miro curiosa lo que iban a conversar.
-esta bien-aceptaba su padre y su hija estaba a su lado sin entender nada- solo respóndeme si estas seguro que mi hija no será dañada-le daba la mano a kurapika que elevaba su mano y la sostenía.
-por supuesto, nadie saldrá herido- promedia y kiiro notaba como su aura cambiaba levemente de color.
"miente" se asusto y dio un paso atrás pero debió controlarse al notar que le miraban.
-desde ahora te quedaras con kurapika que estudiara su habilidad- explico el mayor y la menor le miraba sin entender-te quedaras con el... será tu maestro- continuaba y ella parpadeo varias veces.
-porque?- pregunto confundida- mi habilidad es inútil.
-claro que no, es valiosa- intervenía kurapika y ella noto que decía la verdad.
-esta bien- acepto sin tomar encuentra los detalles y noto como iba a vivir junto a el.
-es.... Es en su departamento?- pregunto sorprendida luego que su padre le ayudaba a hacer sus maletas.
-solo serán unas semanas, hacer el entrenamiento aquí seria peligroso- explicaba y ella recordó que podría poner e peligro a todos si se daban cuenta que su habilidad podría ser útil.
"se están haciendo esperanzas" pensó al mirar la silueta del rubio que le dirigía a su casa y poco a poco comenzó a colocarse nerviosa ya que no se habia percatado que viviría solo con un hombre.
-Te evaluare durante dos semanas- explicaba y noto que el dormiría en el sofá y ella en la cama.
-si- asistió y sintió miedo al tener la misma sensación de incertidumbre que cuando vivía con su madre.
-te llevare al colegio y después a buscar, entrenaremos en cada tiempo libre que tengamos- hablo y ella asistió para ir a la habitación y dejar su maleta en la cama.
-porque me quieres entrenar?- pregunto a los minutos en que se apoyo en el borde de la puerta de la cocina y miraba como cocinaba algo.
-tu habilidad... es única- respondió y ella sintió sus mejillas arder, asi que solo se fue a ver a la ventana y notar que estaban en un piso bastante alto y de como el color de las personas que pasaban era diminuto.
"el atardecer... es bonito" pensó al recorrer cada ventana con gran fascinación ya que era la primera vez que estaba en un edificio.
-la comida esta lista- le hablaron desde la cocina y un poco tímida camino observando como todo estaba servido.
"debería hablar algo?" pensó al estar comiendo en silencio y de alguna manera se sentía incomoda.
-donde conociste a melody?- pregunto una vez de dudarlo varias veces y sentirse preocupada por ser ignorada.
-en el trabajo- contesto con brevedad y bajo la mirada al no saber que hacer- te explicare lo que haremos- interrumpió el silencio cuando ella aun comía con lentitud y elevo la mirada al ver un papel.
-combate cuerpo a cuerpo?- pregunto sorprendida y acomodo sus lentes para mirar de lejos.
-practicaremos bastante, asi que ve a dormir temprano que mañana hay que levantarse en la madrugada- sonreía el rubio y ella obedeció luego de ir a dejar su plato al lavado y limpiarlo como estaba acostumbrada en su casa, asi que se cambio a su pijama para dormir y al estar en oscuridad se quito loe lentes y lograba ver un leve color escarlata a través de la pared.
"es fuerte" analizo y suspiro.
-no confió en ti- susurro cerrando los ojos y despertar con el movimiento en su hombro.
Soñolienta miro como kurapika estaba a su lado y con rapidez se coloco los lentes y ver el itinerario que tenia en la pared, ya que irían a meditar a un sendero lejos de la ciudad.
"hace frio" se quejo mentalmente y estar acostumbrada a no decir mucho para no molestar a otros.
-concéntrate- le regaño el rubio al ver que ella se distraía con cada sonido y no lograba emitir energía alguna.
-no tengo presencia- hablo la menor después unos minutos en que suspiraba al tener las piernas dormidas y no lograba concentrarse ya que aun con los ojos cerrados lograba ver las presencias de los animales a varios metros.
"me duele el estomago" pensó apretando la mandíbula y caminaba detrás de su maestro temporal que le hablaba acerca del combate con sus energías vitales.
-eres débil ya que no emites ninguna-le miro el mas alto y se dio cuenta que la peli anaranjado hacia una mueca de dolor-estas bien?- le pregunto al detenerse y tocarle el hombro.
-me duele el estomago- confeso y apunto a su vientre.
-desde cuando e duele?- le pregunto preocupado y la sostuvo en sus brazos para llegar a su departamento y asistirla.
-de la mañana- respondía al ser tomada en brazos y llegar.
-puedes soltarme- le sugirió el adulto y ella se sorprendió de estar aferrado a su cuello.
-lo siento- se disculpo apenada y se sentó en el sofá y abraso contra su estomago al sentir puntadas.
-te daré una medicina- se apresuro y ella miraba el suelo aun abrumada por su malestar estomacal.
"Que vergüenza" analizo y miro la hora del reloj de pared, siendo que aun faltaba para ir al colegio.
-ten- le interrumpía sus repetitivos pensamientos que hiso que con timidez recibiera el tazón el la infusión caliente, siendo que poco a poco se la tomaba y colocaba una expresión de lo amargo qué era.
-es tarde- susurro para su misma y tomo con rapidez lo que le quedaba para ir a la habitación y cambiarse por el uniforme, que al salir el rubio le esperaba en la salida y caminaron al colegio que no quedaba tan lejos luego que tomar el autobús a unas cuadras.
"ya no me da miedo" pensó con una leve sonrisa al entrar al establecimiento y mirar a su espalda en donde cada vez encontraba mas agradable el color escarlata que emanaba del rubio.
Contenta continuo caminando a pesar que sentía palabrotas o empujones, asi que sin importarle los demás hacia sus tareas correspondientes sin problema alguno.
"me siento rara" analizaba al sentir hinchazón en su vientre y sintió el timbre para salir de clases asi que se apresuro a guardar sus cosas y salir para encontrar al rubio que le esperaba y los demás miraban la escena.
-vamos- decía kurapika y ella asistió con la cabeza y sonrió para si misma la mirar el suelo.
"El me cuida" pensó contenta y al dar un par de pasos por el lugar se dio cuenta que algo salía de su ropa interior.
-no puede ser- susurro al notar que por primera vez le habia llegado el periodo y no sabia que hacer ya que le incomodaba caminar.
"que hago?!" se altero y detuvo para ir a un callejón y quedarse estática de la vergüenza y no poder decirle a su cuidador temporal.
-estas bien? Te sucede algo?- le pregunto el rubio al darse cuanta que ella se habia desviado del camino y se apoyaba en la pared bastante asustada.
-no...na-nada-miraba al suelo y sostenía su falda del colegio para que no viera su percance.
-aun te duele el estomago?- le insistía y ella intentaba alejarse, a lo que observo como la menor lloraba.
-llama a mi madrastra- sollozo avergonzada y este lo hiso de inmediato.
-están fuera de la ciudad- le explico luego de haberle hablado y ella le quito el teléfono.
-tía- susurro alejándose del rubio y noto como sus manos temblaban del miedo y nerviosismo.
-te sucedió algo?- le preguntaba con amabilidad la mujer y noto como la menor lloraba a través de la llamada.
-estoy... estoy sangrando- sollozo y escullo un suspiro de la mayor.
-no te preocupes, estarás bien- decía con su amable voz y ella sorbeteo su nariz y le volvió a pasar el teléfono a su dueño.
-esta bien, entiendo- decía el rubio y ella se sonrojo al saber que le explicaba lo sucedido.
"que vergüenza" se restregaba los ojos que aun lloraban de lo apenada que estaba y noto que kurapika le miraba las piernas con preocupación. Ya que se estaba ensuciando.
-te llevare- le mostraba los brazos a la mas baja que de inmediato negó con la cabeza.
-te ensuciare- se excuso nerviosa y este suspiro para inclinarse a su estatura.
-no te preocupes... estoy aquí para cuidar muy bien de ti- le sonrió el adulto y ella noto como era rodeaba por los brazos fuertes que le sostenían y en minutos llegaron al departamento y ella fue dejada en la puerta del baño.
-te traeré la ropa-fue a la habitación y ella se fue a duchar y notar que su ropa habia manchado la del rubio.
"que vergonzoso" se quitaba el chaleco del uniforme al y notar que este regresaba se tapo de inmediato ya que se veían sus marcas tatuadas en su piel.
-iré a comprar... eso que necesitas-hablo algo confundido y salió otra vez siendo que solo se escucho como cerraba la puerta de entrada.
"no podre mirarlo al rostro" analizo luego de que este abriera la puerta otra vez y que dejara una bolsa con productos femeninos.
-gracias- dijo luego de una hora en que leía las instrucciones para los productos y dudo en salir por la vergüenza.
-solo confía en mi la próxima vez- escucho kiiro cuando se acercaba a la miraba el suelo y el mayor le acaricio su desordenado y húmedo cabello.
-continuemos con el itinerario- susurro ella de inmediato ya que deseaba cambiar el tema.
-por ahora descansa- le sobrio y ella asistió con la cabeza aun con su mejillas rosadas por su percance.
Capitulo 3

Mirando otra vez por la ventana, sonrió al ver que las personas caminaban teniendo colores distintos para cada uno y que al haber bastantes parecía un jardín de flores ante la brisa del viento.
"el color escarlata es el mas hermoso" analizo luego de mirar de reojo al rubio que leía un libro bastante concentrado.
-ven aquí- dijo el y ella se asusto ya que aun le observaba de vez en cuando.
-si- obedeció de inmediato se camino para estar enfrente de el mirando al duelo de forma sumisa.
-tu mano-le mostraba la suya para sostenerla y ella un poco indecisa decide tomársela y este le intenta traspasar su aura.
-soy un contenedor- susurra al saber que es igual que su padre.
-a comparación de el... tu no tienes limite- le sonrió y ella noto que su mano tenia el color escarlata que tanto le gustaba.
-tienes razón -se sorprendió y sintió su cuerpo pesado-eres fuerte- se percato ya que a pesar que lo sabia era sorprendente sentir su poder en su cuerpo.
-ahora camina alrededor de la sala-añadía mientras leí el libro y hacia anotaciones.
-si...-obedecía y al levantase sintió su cuerpo pesado.
"estoy cansada" se detuvo al dar un par de pasos y noto como el rubio estaba débil.
-debo devolvértelo-se apresuro a tocar al rubio y este recogió el libro que se le cayo ante la debilidad-estas bien?- se preocupo al sostener lo del brazo y mirarlo de cerca.
-fue mala idea traspasar todo- sonrió al acariciarle el desordenado cabello y la abrazo por un instante- ahora platicaremos de la habilidad- le aparto y ella sin mas se sentó a su lado y le escuchaba atentamente sus palabras tan agradables que hacia que ves en cuando se distrajera.
"un contenedor... que no emite energía... no tiene habilidad para nada" suspiro ante su conclusión al irse a dormir y recordar lo poco que habia dicho el rubio.
Cerrando los ojos, recordaba la imagen del suelo en el que su madre le obligaba a estar para entrenar el combate cuerpo a cuerpo de generaciones y que ella no lograba hacer debido a su débil visión.
-solo hazlo de una vez, mátalo!- le exigía la mujer de frondoso cabello anaranjado que le obligaba a matar a un hombre en la jaula de entrenamiento pero solo recibió un golpe en el estomago que le hacia escupir sangre de la boca.
-ahhhgg-se quejaba ante las costillas que se le habían roto y sentía el shock en su cuerpo que le hacia permanecer inmóvil mientras la mujer que debería protegerle le lanzaba agua para que reaccionara a continuar-no por favor- balbuceaba y sentía la sangre en su boca que le agotaba y tocia para no tragársela.
"no por favor" suplicaba y sentía como le sacudían y al abrir los ojos notaba que kurapika estaba en la habitación para despertarla.
-recordé algo malo- susurro notando el preocupado rostro de su cuidador que sin decir nada le secaba las lagrimas de su mejilla.
-ya paso- le acaricio el cabello y sintió que ella le tomaba de la ropa para seguirlo hasta la cocina y estar a su lado mientras preparaba el desayuno.
"papá no sabe todo lo que me hiso ella" pensó al soltar al rubio que continua haciendo sus cosas y ella fue al baño para cambiarse de ropa.
-tu estomago aun duele?- le pregunto al ir al lugar de meditación y ella asistió con la cabeza.
-poco- susurro y continuo caminando a su lado mientras lo volvía a sujetar de la ropa y miraba su alrededor que le alguna manera le parecía tenebroso.
"me manche" se dio cuenta al levantarse del suelo en el que meditaban y evito darle la espalda a kurapika que le observaba sin entender su actuar.
-estarás todo el camino asi?-cuestiono en suspiro al entender lo que sucedía.
-si- asistió ya sin tanta vergüenza y caminaba mirando de reojo por donde caminar para no mostrar su trasero.
-cuidado con la serpiente!- le alerto el rubio y ella se giro de inmediato para notar que no habia nada en el camino y al girarse este se reía en silencio.
-eso no fue muy adulto de tu parte- se enfadaba y comenzó a caminar a su lado y sujeto de su ropa ya que le había dado miedo.
-lo siento no pude evitarlo- se reía y le acaricio el cabello mientras caminaban al departamento y al estar cerca del camino de concreto sintió como era tomada en los fuertes brazos que de alguna manera ya estaba acostumbrada.
"es amable" pensó después de cambiarse ropa para ir al colegio.
-hey tontita-le molestaba de inmediato uno de sus compañeras y kiiro simplemente le ignoro y se fue a sentar a su puesto ignorando por completo su exterior.
"quiero estar a su lado" sonrió apretándose los labios y miro al suelo para salir del colegio y buscar con la mirada el color escarlata.
-no esta-susurro al darse vuelta y mirar a todos lados.
-te falto mirar arriba- aparecía de la nada a su lado y ella se callo al suelo del susto.
-ahh-exclamo sorprendida y se acomodo los lentes para mirarlo y sostener su mano que le ofrecía para levantarla, que al estar a su lado caminaron al departamento.
-hoy tengo un compromiso, asi que espérame dentro-le pasaba la llave del piso y ella quedo estática al ser dejada en la entrada.
"sola..." pensó al subir al ascensor y darse cuenta que no tenia nada que hacer.
-llamare a papá- pensó en voz alta al mirar por el balcón los colores de las personas y al levantarse nota que la oscura y densa aura de la chica de cabello celeste estaba cerca del muelle y emitía su poder.
"tengo miedo" se abrazo a si misma y cerro la ventana y cortinas para evitar seguir mirando ya que su cuerpo temblaba ante el tenebroso poder.
-papá no contesta...- susurro al dejar el teléfono fijo donde correspondía y camino por le lugar intentándose entretener con algo.
" el libro" miro el estante y recordó que era lo que leía el rubio en la noche.
-meditar- susurro después de leer y colocarse en el suelo con sus piernas cruzadas.
"colores..." se concentraba y dejo sus lentes a su lado para notar que mientras mas practicaba ver el color del auras de otros mas fácil era verlos, reconocerlos y saber de donde iba.
-escarlata-susurro al mirar a su lado y sentir una respiración cerca de su boca-mis lentes- se altero al sentir que kurapika estaba ahí-donde...-susurro apresurada de buscarlos pero no estaban.
-ya recrece-escucho cerca y como le colocaban los lentes y lograba ver aquel rostro que por centímetros no chocaba con el suyo y de lo sorprendida se sentó para comenzar a apartarse con los pies hasta chocar con el sofá.
-si- susurro ella aun nerviosa y con sus mejillas enrojecidas.
-ven ayúdame a colocar la mesa- decía el otro levantándose del suelo e ir a la cocina donde habia comprado algo para la cena.
Ayudándose se sentaron en la mesa para dos, qué ves en cuando terminaron hablaron del control del nen que kirro sabia que no lo podría dominar pero aun asi debía aprenderlo.
-buenas noches-entro a la habitación y la cerro para ir a dormir que al cerrar los ojos aun notaba el color escarlata que le provoco una sonrisa y sentía que poco a poco caía en el cansancio de un arduo día de entrenamiento mental.
"tu no eres nada" se repetía en su mente al recordar los pasos de su madre contra el piso de concreto que con sus tacones hacia revotar el sonido que cada vez se aproximaba y le hacia saltar del miedo ante la oscuridad.
"inservible" añadía al próximo pensamiento que hacia su respiración acelerar y cuando sentía que la iban a alcanzar abrió los ojos y ver la oscuridad junto con el leve color a través de la pared, asi que aterrada de si misma se levanto de la cama en un acto desesperado por escapar.
"no veo nada" analizo al detenerse ante el color escarlata y se sentó en el suelo para gatear y sentarse a su lado ya que este dormía en el sofá tal como los días anteriores.
-porque estas despierta?-escucho la voz un tanto ronca de kurapika que la miraba recostado.
-ihfh-ihff- emotivo al respirar con su nariz que goteaba y estiro su mano para tocar al rubio por el brazo- tuve una... pesadilla...-explico entre llanto y sintió las manos en sus mejillas que le limpiaban las lagrimas.
-ve a dormir-se levanto y con cuidado le guiaba a la cama.
-quédate- suplico con lagrimas y lo tomaba de su ropa para que se ganara a su lado, asi que ella se recostó y el se gano encima de las tapas a su lado.
Mas calmada continuaba sosteniendo con firmeza la ropa del rubio que estaba a su lado y le observaba al dormir, siendo que aun asi los malos recuerdos volvían haciéndola desesperarse y anhelar olvidar todo aquello.
"espero que mueras siendo nada, por eso eres nada, solo una vida inútil y desperdiciada" retumbaba la voz de su madre aun en su mente a pesar de haber pasado un par de años desde que vive con su padre.
-no...-emitió al despertar y notar que solo era un recuerdo y con su poca visión notaba como ya habia amanecido y que el rubio aun estaba a su lado asi que con desesperación lo abrazo por el costado y se acurruco en su pecho.
-que fue lo que te hicieron que temes tanto-hablo al acariciarle el cabello enredado y ella limpio su lagrimas para sentarse en la cama y mirarlo con dificultad.
-es esto-se quito el pijama y mostraba su sostén infantil.
Sin vergüenza alguna se muestra y hace mirar sus tatuadas marcas para amplificar su poder que fueron un total fracaso.
-no deberías hacer eso-decía algo serio el rubio que estaba sonrojado y miro a otro lado al mismo tiempo que se levantaba de la cama para salir de la habitación.
"tampoco le agradan" concluyo con inocencia sin darse cuenta que habia expuesto mas de lo que debió enfrente de un hombre.
Pasando los días en que entrenaban, estaban nuevamente practicando el traspaso de aura y kurapika le habia traspasado la mitad del suyo y era el segundo día que lo tenia en su cuerpo sin dificultad alguna.
-mi cuerpo sigue mas pesado- le explico al dar sus diagnósticos, pero en realidad ella evitaba decirle que cada vez que se dormía lograba ver unos leves recuerdos de el y no era precisamente agradables.
"la determinación de matar al grupo las arañas" pensaba al día siguiente en donde despertaba, iba a su entrenamiento y luego al colegio, siendo que estaba en clases y pensaba en lo que habia visto en sus sueños.
Mirando su cuaderno escribía la materia en la pizarra y notaba como cada vez tenia mas sueño y cuando menos lo espero se habia quedado dormida por unos minutos y el profesor le sacudía por el hombro.
-lo-lo siento- se coloco nerviosa ya que era la primera vez que le sucedía.
"solo puede utilizar sus cadenas con un fin de matar a esos maleantes" pensó al incorporarse en la silla e ignorar las burlas de sus compañeros.
-entonces... porque la uso en mi- susurro sorprendida de su análisis y se apresuro a guardar sus cosas ya que la campana habia sonado para el termino de la jornada.
"soy parte de eso" se sorprendió al detenerse en plena entrada y notar que el le esperaba como en cada día.
Precavida camino a su lado y sentía su corazón latir rápido por la angustia de saber que no habia solo un simple interés en su habilidad si no que seria usada con fines que no le apetecía ser parte.
"venganza" analizaba al mirar a kurapika que se juntaba junto a su amigo leorio y que le acababa de presentar al estar compartiendo un postro en un restaurante.
-dime kiiro, que te parece el entrenamiento de kurapika?- le hablaba con amabilidad el azabache y ella lo miro fijamente para analizar el color que emitía.
-entiendo mejor mi condición -asistió con la cabeza y luego le sonrió al notar el verdadero color que se mesclaba y le confundía- es calipso- cambio el tema al notar que por fin lo descubría debido a que el ocultaba su presencia de alguna manera.
-calipso?- pregunto confundido ante la niña que continuaba comiendo sumergida en su mundo de colores.
-tu aura- respondía el rubio que miraba a la peli anaranjado y le limpio la mejilla que tenia un poco de caramelo.
"cambio" se percato en y luego que el leorio algo era distinto" preocupado?" analizo y luego miro al plato para continuar comiendo.
Regresando a su casa de su arduo entrenamiento que no dio frutos en cuanto a poder peros si en conocimiento, abrazaba a su papá y luego a su madrastra que le recibían con alegría tenerla de vuelta.
-a tenido paciencia- explico ante su padre que le habia pedido que fuera a su taller.
-su conocimiento es sorpréndete para su edad- decía contento el mayor que le entregaba un regalo a su hija
-edad?-se sorprendió ya que nunca lo habia pensado.
-solo tiene 20 años y es parte del grupo zodiaco- le comentaba el hombre que martillaba para hacer encajar una pieza de madera.
-es un cazador?-pregunto y sentía que cuando el nen de kupapika estaba en su cuerpo vio y escucho ciertos pensamientos.
"Hare lo que sea para llevar a cabo mi venganza" abrió los ojos luego que se fuera a dormir y desertara de golpe al ver una borrosa imagen de ella como utensilio para su venganza.
-soy... parte...- susurro sorprendía a pesar que ya lo habia deducido, asi que se volvió a recostar y abrió la cortina de su habitación para mirar la luna que solo reconocía por su bello resplandor.
...
-hija estas meditando otra vez?- le pregunto a los días el mayor que entraba a la habitación en donde no logro recibir respuesta ya que su hija estaba en un transe que al observarla de cerca noto que ni siquiera su respiración la sentía, como si no estuviera y solo de vista.
"puedo ver el color de cada persona que esta a 10 metros de mi" pensó al abrir los ojos y notar que ahora era mucho mas claro y que de alguna manera sus ojos ya no le parecían un obstáculo.
-tengo hambre- se quejo la menor al caminar por el pasillo e ir a la cocina.
-tu cena esta aquí- le hablo su madrastra que aparecía en la cocina tras escucharla.
-oh, gracias- sonrío y la mayor se dio cuenta que algo habia cambiado.
-estuviste dos días seguidos meditando- le comento cuando se sentó junto a ella para hacerle compañía.
-que?-elevo la voz sorprendida y miro el teléfono de la mayor para notar que era verdad-como es eso posible?- se sorprendía aun mas y continuo comiendo sin creerlo.
-donde esta mi princesa?- apareció esta vez el jefe de familia que abrazo a su hija y le miraba feliz-estas mejorando- sonrió y le acariciaba su desordenado cabello naranjo
-si papi, ahora soy de utilidad-sonrió al continuar comiendo.
Yendo a dormir para tener que ir al colegio, se tumbo en la cama con una sonrisa en su rostro después de compartir tiempo con su familia y sentía que otra vida acabada de ver ante sus ojos.
"no me importan sus agresiones" pensó al ser empujada en el pasillo y caerse como en todos los días, pero esta vez logros sostenerse con la mano y asi no lastimar su rostro.
Decidía con su nueva meta de ser de utilidad, camino a su casa sin error alguno al esquivar los colores y asi no dejar guiarse por la multitud, asi que al llegar a casa se cambio de ropa y fue al patio para meditar pero fue interrumpida por su padre que le entregaba una pistola automática.
-si quieres ser fuerte tienes que usar toda clase de recurso-le dijo cuando ella le miro sin los lentes pero le reconoció de inmediato.
"los objetos no tienen vida ni colores, pero las armas emiten un leve destello azulado" se dio cuenta y miro a su padre que estaba dispuesto a enseñarlo lo que sabia con tal de que ella fuera feliz.
-me da miedo-apuntaba a su objetivo con el arma de fuego que esta cargada y estaba a solas con su padre en otra parte de la casa donde el mayor solía practicar y era aprueba de sonido.
-relájate y apunta- le repetía otra vez y ella en cuanto apretó el gatillo cayo al suelo y le disparo al techo-creo que es muy pronto -analizaba luego y le entregaba un cuchillo.
-es pesado- se quejaba otra vez y su padre suspiro al saber que era demasiado débil.
-y si mejor soy una sombra-propuso y noto como su papa se le iluminaban los ojos ante su idea.
-serás una sombra- se emocionaba y comenzaban a practicar su lado sigiloso.
"soy torpe" se entristeció al caerse después de practicar con sus compañeros de clase y los evitaba a toda costa o intentaba pasar desapercibida, pero se caía de la nada ante su torpeza.
-kurapika?- susurro analizar de clases y ver el color escarlata y fue a donde provenía.
-has mejorado- escucho y este le acaricio el cabello.
-si- asistió y sonrío contenta de su lado-estas triste- le dijo después de caminar hasta un parque y ese le invitara a tomar una bebida.
-me iré por un tiempo- confeso y por alguna razón tenia desanimo.
-cuando volverás?- le pregunto con inocencia y noto como el mayor le tomaba de la mano y se la besaba.
-en unos meses-respondió y sonrió con tristeza.
-yo entrenare y cuando regreses te mostrare mi progreso-volvía a sonreír y este la abrazo.
-esperare verte otra vez-añadía y la soltó para aproximarse a su rostro pero se detuvo-puedo besarte?- pregunto y se dio cuenta como la peli naranjo no entendía a lo que se refería.
-porque?- pregunto cohibida por su cercanía.
-si me besas me trasfieres otra clase de energía- explico y ella se mordió el labio algo indecisa.
-es enserio?- le creía al rubio que sonrió y la beso sin descaro alguno.
-si... pero solo funciona contigo-volvía a sonreír y se separo- tengo que marcharme- le levantaba al mas alto y la menor le tomó de la ropa.
-ten cuidado-le susurro algo avergonzada y lo soltó para salir corriendo.
"me beso..." pensó alterada al avanzar con rapidez y darse cuanta que no habia chocado con ningún color.
-como un beso te da energía?-se pregunto a si misma al estar e su casa sola debido ya que sus padres habían salido-es algo que en su tribu tenían por costumbre?-analizaba confundida ya que nunca habia escuchado de aquello.
"no lo entiendo "cerraba los ojos y sintió como su mascota le perseguía ya que sus cordones del zapato estaba desabrochado.
-no, hana! no!- se alteraba al correr por la casa y temer por los arañazos de su gata.
-miau-emitía el animal que se le lanzaba en la espalda y la botaba al piso.
"mis lentes" se altero y al mirarla se dio cuenta que emitía un color humano.
-que eres?-pregunto y la gata se detuvo y se lamio la pata.
"no me muerdas" se asusto al tocarla y notar que no era un gato ordinario.
-un gato místico- se altero al ver que le traspasaba un poco de su nen y lograba ver una imagen de sus memoria.
-miau-respondía y sintió como su cuerpo se desvaneció del asombro.
-hija, hija- le sacudía su padre que habia llegado a las horas y se apresuro a verla ya que estaba en el suelo.
-estas bien? Que te sucedió estas herida en alguna parte?- se alteraba su madrastra que tenia consigo una toalla mojada y se la pasaba por el rostro.
-creo que... me quede dormida- intento calmarlos y sonrió para ellos.
-realmente nos asustaste- suspiro el jefe de hogar y la sostuvo en su brazos dejándola en el sofá -quédate aquí, te compramos un postre, te lo traeré- le decía cariñosamente y le beso la frente a su hija para ir a la cocina.
"me dio energía" sonrió con inocencia al supuestamente entender a lo que se refería el rubio.
Mirando a los mayores, suspiro contenta de saber que los tenia a su lado y que debería haberse dado cuenta antes, ya que a pesar de su cruel pasado no debería dejar de lado a sus seres queridos
-papa, de donde vino hana?-le preguntaba luego de estar comiendo la cena todos reunidos y el animal estaba cerca y elevaba su orejas al escuchar su nombre.
-creo que de un trabajo en otro continente-intento recordar pero no podía asi que se acomodo la barba para continuar comiendo.
-no es un gato normal-comento y sintió como unas garras se clavaban en sus piernas-ahh hana!- lloriqueo y su madrastra sacaba a la gata.
-solo es distinta- sonreía la mayor que le acaricio el cabello


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