APL Capitulo 3



Capitulo 3

Fruncía el seño al ver que su compañero de hamaca seria nada menos que Hisoka, realmente no comprendía… suspiro lentamente para no ser escuchada, estaban en la bodega de la cocina, que además ocupan de habitación para el cocinero en este caso ella… no le agradaba estar cerca de ese tipo, su cuerpo se erizaba al saber que tan vil persona se encontraba a tan poca distancia, a pesar que pensaba una y otra vez que no lograría dormir, pues lo hiso su delicado cuerpo necesitaba descansar hacia mucho tiempo que no utilizada su habilidad.
-A despertar mis queridos tripulantes, el día de hoy será despejado así que tenemos mucho por recorrer-. Hablaba Baruch el capitán por el altavoz, en ese instante ______ despertó de golpe, ella debería despertar antes que él les digiera a los demás que era la hora del amanecer, como no estaba acostumbrada a la hamaca se sentó en ella perdiendo el equilibro cayendo a la de abajo, que para su suerte estaba vacía. Ignorando a su alrededor fue hasta su mochila la cual estaba colgada a los pies de las hamacas se cambio su ropa de dormir, cuando se dirigía a la puerta encontró a Hisoka sentado en un barril comiendo una manzana con los ojos serrados como si deleitara cada partícula del sabor de la fruta, lo observo por unos segundos su vestimenta era como cuando lo conoció, mientras tanto el continuo ignorándola, salió del lugar para preparar el desayuno a la tripulación ,estimaba que solo tendría treinta minutos, unos de los ojos de la joven estaba negro en su totalidad, con su mano izquierda calienta el horno utilizando su aura y con la otra imita objetos con los cuales se ayudaba en la cocina, su débil cuerpo extrañamente recordaba su pasado y cada vez que lo hace sonríe, todo lo que tiene es recuerdos, no muy bellos pero es lo único que le recuerda día a día, que el hoy es el bello recuerdo del mañana, murmuraba la única melodía que escucho mientras estaba sola en los recuerdos de oscuridad, era solo una palabra “Bungee”, solo eso recordaba… mas allá todo era la infinita oscuridad.
-m- n- mm… m- n- mm…-. El medio día estaba  con todo su esplendor hoy era un gran día para la peliceleste, y no ocultaba sus emociones.
-¿padre puedo ir a la proa?-. Suplicaba una y otra vez Charlotte, el capitán un poco cabreado por las peticiones, la continuaba ignorando, no dejaría que su hija estuviese más cerca que lo que es debido con los hombres que trabajanban para él, solía evitar que su hija fuese el centro de atención del barco.
-vamos capi será solo un momento yo la cuidare-. Hablo después de haber expresado continuamente la misma y pequeña melodía.
-si padre… _____ me cuidara a así no tendrás que preocuparse-. Se ilusionaba la menor, su largo cabello tomado resplandecía con su mirada, su padre sin palabras acepto, moviendo la cabeza.
-no olvides tu trabajo-. Frunció el seño el capitán una vez que salían de la cabina.
-no se preocupe en estos momentos lo estoy realizando-. Mostro una  de sus mano completamente negra de Nen tenía un leve hilo conectado a la cocina, mientras esta hornea lentamente el almuerzo de hoy, se coloco el gorro para el sol de color amarillo, sus uñas se tornaron al constante negro de su aura para ocultar la presencia de este.
--m- n- mm… m- n- mm…-. Tatareaba una y otra vez, Charlotte la miraba con atención, pero no se atrevía a preguntar qué melodía era, los demás de la tripulación observaban mientras paseaban por la  cubierta, la mirada de sed de sangre que tanto detestaba la observaba, mientras la buscaba los chicos de la noche anterior le hacían señas.
-Gon, ¿Killua? si no me equivoco-. Camino a donde estaban ellos olvidándose que estaba acompañando a alguien, y la chica solo la siguió. -Hey, ¿cómo están?-. Decía pero antes que respondieran alguien rodeo los hombros de _____.
-oh… pero que coincidencia… Mmm Gon… Killua… -. Un escalofrió rodio el cuerpos de los cuatro.
-Hi… Hi, ¿Hisoka?-. Respondieron al mismo tiempo los dos amigos.
Permanecieron unos minutos asimilando la escena, la peliceleste miro a Hisoka, traía otra vez la ropa de colores pálidos, miro la pálida y fuerte mano que rodeaba sus hombros, dio un largo suspiro mientras miro el horizonte… “ser abrazada completamente por él, sus fuertes brazos alrededor de mi cuerpo” se imagino.
-algo  está a punto de quemar, me pregunto que será…-. Su seductora voz le erizo la piel, no dijo nada y se permaneció ahí estática sin reaccionar, entonces fue cuando miro su mano… estaba utilizando mas Nen de lo que debería.
Salió de la escena bruscamente mientras los demás la observaban, toco sus mejillas con ambas manos mientras daba la espalda mordiendo su labio inferior.
-¡maldición!-. Murmuro una vez en la cocina, no entendía como su imaginación la traicionaba de esa manera… eso era imposible, continuo con su trabajo, y una vez que terminó, se fue a dormir, no estaba cansada, y sus pensamientos no dejaban de recordar aquellas manos “acaso mi fetiche son las manos” exclamo para sí misma en su mente, los días pasaban en un abrir y cerrar de ojos, el horizonte ya no era despegado, el clima se tornaba a oscuridad ______ lo sabía, sabía lo que se aproximaba, sabía muy bien que los animales marinos como los del cielo controlaban los vientos y mar, su presencia no era bienvenida, sería mejor apresurarse… no le gustaría tomarse con la calamidad otra vez.
Una gran tempestad azotaba esta noche al barco, pero el pesado sueño de la peliceleste no se interrumpía, unos de los bruscos  movimientos de la marea saco a ______ de su hamaca haciendo que callera encima de su compañero de hamaca, a pesar de eso… no despertó, se acomodo su rostro encima del cuerpo de este, Hisoka confundido con aquella escena permaneció quieto por unos minutos, toco el cabello celeste de la joven, era esponjoso, suave como imagino y al quitarle uno de ellos su color cambio de color a negro.
-oh magnifico-. Expreso con su seductora frialdad, el cabello cambio a ser un hilo de Nen, levanto el rostro de la chica, esta babeaba en su pecho, y otra vez se sorprendió… su saliva también se convertía en aura una vez que no estaba conectado con ella.

A la mañana siguiente despertó con mucha más energía de lo normal y por lo visto antes de lo que acostumbra, miro a su alrededor, el Nen rosado de Hisoka estaba sujetando su hamaca en las paredes haciendo que fuese imposible de caerse de ella, se dio cuenta que era como un elástico, coloco su mano azul para comerse aquel Nen, si continuaba así, podría llegar a hacer una copia de la habilidad, con su poder de observación lo copiaría de forma igual, miro a su compañero de hamaca aun dormía, era extraño… no solía estar cuando ella despertaba, se cambio de ropa y al voltearse ,el  con una mirada melosa observaba los movimientos de su cuerpo se paralizo completamente, quedando estática, miro a otro lado y salió del lugar “debo alejarme de él lo más posible” pensó.  

CONTINUARA…   
Capitulo 4

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